México importó en los primeros seis meses del 2023 alrededor de 415 mil unidades para venta interna, casi el 30% se fabricaron en China
La pandemia cambió muchas cosas en el mundo y no solo hablando de las preocupaciones de salud global, sino cómo la economía se moverá en los próximos años.
En el caso de la industria automotriz, el giro fue radical sobre todo para nuestro mercado. Del 2020 para acá la llegada de vehículos fabricados en China ha presentado un crecimiento exponencial.
El representante más importante es, hasta el momento MG, dentro del top ten de ventas, cerca de Hyundai, vendiendo más que Ford o Honda, aunque JAC fue de las primeras marcas en llegar a nuestro mercado en 2017.
Aun así, General Motors ha sido la marca que más ha utilizado China para mantenerse competitivo en los segmentos más complicados del mercado.
De los primeros en vender acá fueron el Buick Envision por ahí de 2016 hasta ser hoy en día el grupo de marcas de origen no chino en ofrecer la mayor cantidad de modelos.
Pero lo que hace 5 años no representaba un volumen importante en ventas, después de los primeros seis meses de este 2023, del total de las 415,286 unidades de importación vendidas en México, que representan el 65.5% de las ventas totales, 120,254 son de China.
De este modo, el 28.9% de los vehículos importados comprados en México, vienen de ese país y del total de las ventas en suelo azteca, China representa un 18.9% de compras.
Casi uno de cada cinco modelos que se venden en México, son chinos.
BMW, Buick, Chevrolet, Dodge, Ford y Peugeot ofrecen modelos de China, pero quien más ha sacado ventaja de la producción de modelos es GM, que ofrece en México 11 diferentes vehículos, 10 de Chevrolet y uno de Buick.
En total GM ha comercializado 61,999 unidades en estos seis meses de un total de 82,866 unidades. China representa 74.8% de sus ventas
Varios analistas pronostican que para el 2023 la mitad de las ventas en México serán de modelos de origen chino.
Me parece que en los próximos cinco años veremos un incremento exponencial, con más marcas llegando, otras retirándose porque la competencia será férrea y encarnizada.
Quizás el 50% del mercado suena a mucho, pero estamos, me parece, solo viendo la punta del iceberg.
Recuerdo muy bien los autos chinos de hace apenas 10 años; estaban años luz a los que nos llegan ahora al mercado y la rapidez con que reaccionan mejorando sus productos es abrumadora.
Así es que con lo que sabemos que llegará en los próximos meses, las mejoras que ya están haciendo y los planes para establecerse en México con miras al mercado de Estados Unidos y Canadá, ese 50% suena sumamente posible y mucho antes de tiempo.
Al final la llegada de estos productos representa para el comprador un beneficio clave para su bolsillo, pues encontrará en plataformas como Bitcar opciones para acceder a diferentes modelos para conocer de primera mano la oferta china.