GMC presentó la nueva generación de la Canyon para 2023 y al mismo tiempo anunciaron que su pick-up mediana volverá a México, luego de haberse comercializado en su primera generación y de la ausencia del mercado mexicano los últimos 10 años.
La nueva GMC Canyon reta una vez más al segmento de las pick-ups medianas, que ha crecido mucho especialmente en Norteamérica ante el incremento de precios y de tamaño de las alternativas más grandes, pero también considerando que estas cada vez son más capaces y pueden tener el mismo lujo y capacidades de carga o arrastre muy cercanas a la categoría de las full-size.
El diseño representa una evolución total, porque las líneas suaves se han ido en pro de trazos más marcados y agresivos, con una fascia prácticamente vertical que integra la gran parrilla de la marca y las unidades de iluminación de LED.
Y el músculo de la nueva GMC Canyon se nota en otros puntos más allá del diseño, porque el chasis incrementa el ancho de vía y monta una suspensión todoterreno de serie, con 51 mm de despeje al suelo adicionales en las versiones Elevation, AT4 y Denali y hasta 76 mm en la AT4X más extrema, con llantas Goodyear Wrangler Territory MT de 33 pulgadas, especiales para conducción fuera del pavimento, en esta última.
La Canyon tiene salpicaderas pronunciadas y los prominentes logos de GMC en la compuerta posterior, que cuenta con un espacio de almacenamiento y a prueba de agua, con 114 cm de ancho.
La única carrocería disponible es la de cabina doble y en la batea se incluyen múltiples soluciones para asegurar la carga y una toma de corriente de 110 voltios.
Con un exterior que se ve así de bien, el interior también es revolucionario, porque podemos estar ante la cabina más lujosa de la categoría, de la mano de un diseño moderno, mucha tecnología y materiales de muy buena apariencia. La conectividad está solventada por la pantalla táctil de 11.3 pulgadas con Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos, OnStar e integración nativa con el asistente de Google.
Entre cada una de las versiones, habrá cambios importantes, pues cada interior está diseñado para tener una identidad propia, cambiando acentos, detalles y hasta los materiales en sí en algunos puntos. Lo mismo pasa con el exterior, pues la versión Denali tiene la tradicional parrilla cromada y rines de 20 pulgadas, mientras que el interior cuenta con el máximo nivel de equipamiento, desde asientos calefactados y enfriados hasta el cuadro digital de 11 pulgadas, con un head-up display de 6.3 pulgadas, sonido Bose de siete altavoces y terminados de madera de poro abierto.
Y para los que quieran las máximas capacidades 4×4, la versión AT4X es la más radical, con bloqueo electrónico de diferenciales delanteros y traseros, protección adicional en las partes bajas o los sobresalientes amortiguadores Multimatic DSSV con su modo de manejo Baja, especial para las condiciones más exigentes y más radical que el Off Road en el resto de la gama, además de las ya citadas llantas y el incremento en el despeje libre al suelo para un total de 270 mm. Y a pesar de ser la más enfocada a conducción off road, el lujo sigue estando presente en la AT4X, con acabados tipo obsidiana y cerámicos, asientos eléctricos ventilados y calefactados y con el logo AT4X bordado.
El posicionamiento premium de la nueva Canyon se refleja bajo el cofre, pues emplea el motor 2.7 litros turbo de cuatro cilindros, desarrollado desde cero para su uso en pick-ups y con 310 hp y 430 lb-pie de par, asociado a una transmisión automática de ocho velocidades y con tracción trasera o 4×4, que le dan una capacidad de arrastre de 3.5 toneladas y hasta 744 kg de carga, sumando el diferencial autoblocante en las AT4 y Denali.
La tecnología enfocada a la seguridad está presente en todas las versiones, empezando por el frenado autónomo de emergencia que detecta peatones y ciclistas, además del asistente de mantenimiento de carril y faros IntelliBeam con luces altas automáticas, mientras que el frenado de emergencia posterior, asistente de dirección en punto ciego, control crucero apatativo o cámara panorámica, incluyendo una debajo del auto para visualizar obstáculos todoterreno, serán opciones adicionales.
General Motors confirmó que la nueva GMC Canyon llegará a México en el 2023, poco después de su lanzamiento en Estados Unidos.