Aunque Ferrari no quiere llamarle SUV, lo cierto es que este nuevo producto de la casa del cavallino rampante llega al mercado a ponerse al tu por tu con modelos de la talla de una Aston Martin DBX o Lamborghini Urus.
Sobresaliente en su diseño y soluciones mecánicas y tecnológicas para hacerle digna de llevar el sello de Ferrari, la o el Purosangue tiene bajo el cofre un soberbio V12 atmosférico de 6.5 litros con 715 caballos y 518 lb-pie de torque.
El motor va colocado en posición delantero central, es decir, atrás del eje delantero y la caja, una de ocho cambios de doble embrague, va colocada en la parte trasera para ofrecer un reparto de pesos 49:51.
Con ello consigue un 0 a 100 km/h en 3.3s, un 0 a 200 km /h en apenas 10.6s y una velocidad máxima de 310 km/h.
La inclusión de este motor supuso todo un reto de diseño, aerodinámica, habitabilidad y refrigeración, pues el tamaño del propulsor no debía afectar las proporciones de un buen SUV, permitir una línea deportiva digna de un Ferrari y no sacrificar el espacio interior, una de las metas clave del porqué hacer un SUV para la marca.
Aun así, retoma muchos elementos de diseño de otros modelos de la marca, como las estilizadas calaveras del 196 GTB o los faros que recuerdan al SF90.
Como remate se ofrece una espectaculares puertas posteriores suicidas, decisión que se tomó para permitir el mayor espacio de entrada para la distancia entre ejes que ofrece.
La cajuela es de 473 litros, no mucho en realidad, pero se pueden abatir los asientos de la segunda fila para mejorar la capacidad de carga.
Ahora bien, como buen producto de casa, el bastidor del Purosangue es completamente nuevo y fabricado en aluminio de alta resistencia, combinado con acero en ciertos puntos de la carrocería para reforzar la estructura en cuestiones de desempeño y seguridad.
Complementa un techo de fibra de carbono que es 20% más ligero que uno de aluminio, pero mucho más rígido y silencioso para otorgar niveles de insonorización adecuados para un auto de este talante.
La carrocería, al mismo tiempo, está fabricada en aluminio, acero y fibra de carbono.
La tracción es integral, primordialmente posterior y mediante una caja de transferencia se manda torque al eje delantero, de acuerdo a las condiciones de tracción. La dirección es también las cuatro ruedas.
Y tecnológicamente, suma un novedoso sistema de suspensión activa denominado Active Suspension Technology, aportado por la marca Multimatic (la misma que surte a la Chevrolet ZR2, por ejemplo), que combina una válvula electrónica y un amortiguador hidráulico que además son asistidos por motores eléctricos de 48V.
Así es, en pocas palabras para todo el derroche tecnológico y de diseño que ha empleado la marca, el primer Ferrari de 4 puertas y 4 plazas, con carrocería levantada.
