Es imposible que las marcas chinas no sigan en la conversación de compra y venta de autos en México, ahora los mira Trump
Sobre autos chinos se habla todos los días, sea la venta, la falta de refacciones de algunos modelos o la llegada constante de más versiones y marcas; como sea, siempre se habla de las marcas chinas.
La conversación gira mucho sobre si tendrán o no una planta en México dependiendo, claro está, de sus planes de utilizar nuestro mercado como punta de lanza para conquistar el segundo mercado más grande del mundo: los Estados Unidos.
Todas las marcas que han llegado a México han asegurado planes concretos para establecer una planta sin importar si existe o no una política proteccionista del país del norte para que no ingresen a su mercado.
La verdad es que hay aranceles altísimos para que los eléctricos chinos no puedan llegar a las calles de los Estados Unidos lo cual, a pesar de su precio, no les hace ya una oferta tan atractiva.
La realidad es que establecer una planta solo para México puede no ser tan atractivo, el tamaño del mercado de los Estados Unidos es lo que realmente les atrae y las cosas parecen tomar un giro interesante.
Donald Trump, el candidato republicano acaba de allanar el camino asegurando que no está en contra de los autos chinos, siempre y cuando cooperen con el gobierno de ese país.
Es decir, una planta pudiera ser la puerta de entrada para los eléctricos chinos lo que complicaría todavía más la llegada de estas factorías para el mercado mexicano.
Tal parece que la estrategia que todos los mercados empezarán a tomar es clara, si no les puedes vencer, úneteles. ¿Será que incluso Trump esté dispuesto a dar su brazo a torcer y buscar más beneficios que conflictos?
El tiempo lo dirá, por lo pronto, nosotros, como se dice por ahí, “nomás mirando”.
